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Ubi sunt?

¿Dónde resuenan el miedo
 y el dolor?
¿Adónde han ido
las voces sepultadas
de los vivos,
los parques arrasados,
los juegos de los niños,
los cuadernos sedientos
de aprender,
el pan cocido a medias,
el olvido
de las pequeñas cosas,
el polvo del camino,
y el miedo?
Me resuena el silencio
¡Yo lo oigo!
Las olas llevan
en su baile un grito.
Esta
hilera
de
muertos
no es de nadie.
¿De qué ha servido
tanto dolor robado?
¿Adónde ha ido?
Hoy todo me recuerda
la culpa de ser vivo.
(María de Líbar)





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