Ir al contenido principal
La palabra responde por el mundo. Hay mañanas
en que oímos el mar, la tierra en ella.
Es una cueva oscura, o un relámpago fijo.
Noches que se iluminan con la palabra humana.
¡Un firmamento o voz!
Pero a veces, muchas más veces, la palabra limita
con el hombre, es el hombre. La palabra gimiendo,
la palabra escuchando. (“Dime amor”). La palabra
escupiendo, apostrofando, reuniendo.
Clamando como solo una ardiente campana
fundida y aún colgante, vibrando, reclamando,
mientras todos los hombres a su voz se concentran,
y hay un coro de brazos, de puños proferidos,
una voz, y son todos. 
La palabra es un hilo
de voz, y es una madre. 
Y es un niño esperando.
Y es un padre en su fragua.
Y es un carbón brillando.
Y es un hogar que ardiendo quema las voluntades,
y nace el hombre nuevo (...) (Vicente Aleixandre)

Comentarios

Entradas populares de este blog

"Vamos a ser felices", Luis Alberto de Cuenca

Vamos a ser felices un rato, vida mía, aunque no haya motivos para serlo, y el mundo sea un globo de gas letal, y nuestra historia una cutre película de brujas y vampiros. Felices porque sí, para que luego graben en nuestra sepultura la siguiente leyenda: "Aquí yacen los huesos de una mujer y un hombre que, no se sabe cómo, lograron ser felices diez minutos seguidos." (Por fuertes y fronteras).

Manuel Vicent, Aguirre el Magnífico

elpais.com He leído Aguirre el Magnífico porque pertenece a un subgénero que cada vez me gusta más, la biografía novelada. Y no me ha decepcionado. Vicent cumple con creces pues da cuenta de la novelesca vida de este personaje salido de los espejos deformantes del callejón del gato, según asegura el propio autor. No es que Vicent haga una descripción grotesca del personaje, es que los materiales que la historia de España más reciente y que el propio Aguirre proporcionan son en sí, al menos, pintorescos. Por lo demás, no creo que Vicent traicione a su amigo biografiado, aunque, eso sí, se cumple lo que le dijo el Rey en la recepción del comienzo de la obra, cuando Aguirre le presentó a Vicent como su “futuro biógrafo”:  "Coño, Jesús, pues como lo cuentes todo, vas aviado". No sé si cuenta todo, pero hay suficientes anécdotas, muestras de su aguda inteligencia, comentarios irónicos y malvados, puros cotilleos que permiten un acercamiento a la personalidad de este ser t...
“La democracia no consiste en que el pueblo sea contado, sino en que el pueblo cuente”. (Federico Mayor Zaragoza). Pincha aquí. Una reflexión esencial para nuestro tiempo